México es invadido

Foto de Alex Fu

escrito por Dr. Shonen

    Viajando, siempre viajando. La escena es oscura al caminar por la única vía de concreto hecha para los automóviles que no sirven. Un paisaje desolado que recuerda cuando se podía ir de un lugar a otro por el mero hecho de vacacionar. Su único acompañante, una radio. La tecnología análoga es la mejor y lo único que la humanidad pudo hacer bien. Con un audífono en la oreja este hombre escucha todas las frecuencias que se puedan captar.

    —Es increíble lo que pasa en el país, mensajes y noticias llegan de todas partes de la república. Aunque, no hay información de parte del norte, aún no se ha propagado por allá, diversas fuentes confirman a seres vistos caer del cielo y que han empezado a matar gente. Todos los espacios informativos disponibles aseguran que esto empezó por el sur, en Yucatán, son los rumores. Quizá por donde cayó el meteorito de los dinosaurios, aún no sabemos lo que quieren…

    El hombre cambia de estación y sonríe con ironía.

    —¡No puede ser! —se escucha desde su pequeña caja—. Hace unos minutos, aproximadamente a unos 3 kilómetros de la plaza las fuentes en Jalisco, aquel cilindro que cayó del cielo ha empezado a levantarse. —El hombre traga—. Parece una máquina, ¡parece que se abrió! Están… están saliendo unos pulpos verdes que… ¡Aaah! ¡Disparan! ¡Están disparando! ¡Escupen fuego! ¡Para allá! ¡Corre para allá!

    Entre gritos y ruidos, el hombre cambia de estación.

    —Si alguien nos escucha… —Una nueva voz retumba en su oreja—. Hemos sido atacados por unas supuestas naves que cayeron del cielo, nos atacaron. Si alguien nos escucha, yo y varias personas que apenas logramos huir nos refugiamos en una casa en la calle Vicente, en Chiapas; por favor vengan a ayudarnos… —Llora—. Nuestra camioneta de controles se descompuso, no podemos salir… Si alguien nos escucha, si es que alguien nos escucha, yo y varias personas que apenas logramos…

    El hombre cambia de estación. Pone una cara seria.

    De repente se escucha gritos y ruidos de máquinas, el hombre apaga la radio y salta sobre una pila de escombros que solía ser una caseta de policía. Los artefactos parecen ser metálicos, se van alejando. Después de unos minutos el hombre enciende con mucho cuidado la radio y le baja el volumen. Se escucha a gente pidiendo auxilio.

    —¡Por favor! ¡Ayúdenos! ¡No podemos soportarlo más!

    Cambia la estación con desesperación, de pronto se escuchan sirenas con un volumen muy alto; rápido cambia de estación. Estática. Cambia de estación. Una grabación militar.

    —Esta es la armada de Guerrero, le pedimos a todos los ciudadanos que guarden la calma, recomendamos refugiarse dentro de sus casas. El ejército se ocupará del asunto. Esta es la armada de Guerrero… —El hombre niega con la cabeza y cambia de estación.

    Al fin se para del suelo, asoma su cabeza por encima de los restos, se escucha música tranquila. De repente una luz ilumina la carretera y apaga la radio. Se ven destellos de colores. El hombre se acuesta y se cubre con una sábana sucia y negra que siempre guarda en su mochila. Pasan unos minutos, adentro de donde se encuentra el hombre pone su radio en un volumen más bajo y se ajusta el auricular en el oído; una persona menciona los lugares invadidos.

    —Esta es cadena nacional, buenas noches tengan todos ustedes. —El hombre abre los ojos, sorprendido y con enojo—. Radioguadalajara les informa los últimos acontecimientos del país… Eh… Tenemos reporte en vivo sobre una posible invasión. Nos acaban de mandar la orden de mencionar los estados devastados por esta, mucha atención por favor: Campeche, Chiapas, Tabasco, el hombre sonríe, de allá viene, Veracruz, parte de Oaxaca, parte de Puebla, Ciudad de México, Hidalgo, parte de Jalisco, parte de Colima, parte de Morelos. Hasta ahora estos son los estados confirmados. Al parecer, en el resto de la república no ha pasado nada, valga esperar información de otros países y de otro continente.

    El hombre cambia de estación. Una persona menciona diferentes nombres.

    —Sofía, Camila, Santiago, Mateo, Alejandro, Matías, Adriana, Valeria, Diego, Victoria, Samuel, Lucía, Sara, Nicolás, Daniela, Martín, Joaquín, Gabriela, Gabriel, Bruno, Elena, María, Natalia, Daniel, Adrián, Mariana… —El hombre cierra los ojos con esfuerzo. Cambia a la estación de música y cierra los ojos. 

    Amanece y el hombre descubre su cara, voltea a ver a todos lados, se sienta. Está empapado en sudor, cubierto de tierra y escombros. Saca las baterías de su radio y pone otras, la enciende y se escucha estática. Se pone de pie, se asoma y vuelve a cambiar de estación. Se escucha una grabación de advertencia.

    —Por eso sugerimos que permanezcan en sus casas o vayan a los albergues más cercanos. Esta es una grabación del ejército mexicano. Hemos sido invadidos por seres de otro planeta. Al parecer esto solo sucedió en México, los equipos militares y de urgencias médicas han colocado estaciones y albergues en puntos estratégicos en toda la república, hay más de mil trescientas estaciones por estado. Soldados se han ofrecido ir a las zonas más afectadas para llevar comida, botiquín y otros recursos. Por eso sugerimos que permanezcan en sus casas o vayan a los albergues más cercanos… Esta es una grabación del ejército mexicano. Hemos sido invadidos por seres de otro planeta. Al parecer esto solo sucedió en México…

    El hombre suspira, cambia la estación.

    —La temperatura en el norte del país llegará a ser de 30 grados, y en el sur del país será de 20 grados con probabilidad de lluvias. Será un día difícil para los que decidan salir de sus casas…

    Mientras escucha la última grabación, abre un mapa. Marca el norte, lo guarda. Retoma su camino por la vía de concreto que lo ha acompañado ya por más de 7 días.

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  ➤ Dr. Shonen es un escritor mexicano emergente con gran pasión por las letras y deseo de dar a conocer las suyas.

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